Jan Echevarría. Calor, sofocos, sudor... lo cierto es que correr en verano da a veces un poco de pereza; lo sabemos. No obstante, para todos aquellos que no queráis perder la forma durante la época veraniega tenemos una solución: bienvenidos a los paraísos del trekking y la caminata playera.
Es por todos sabido que los meses de julio, agosto e, incluso, septiembre son idóneos para caminar. Muchos estamos de vacaciones con nuestras parejas y amigos, y verano tras verano aprovechamos para hacer kilómetros y kilómetros de paseo ya sea sobre la arena o la montaña.
Y es que pasear es un buen plan: nos ponemos morenos, podemos hablar de nuestras cosas de manera relajada, disfrutamos de maravillosos paisajes sin prisas y, además, hacemos ejercicio, lo que nos sirve para endurecer nuestros cuadriceps y gluteos, sin apenas darnos cuenta. Una actividad estupenda si deseamos lucir buen tipito en vacaciones (y mucho mejor si lo completamos con una dieta equilibrada).
Pero no hay que obsesionarse. Aunque estés acostumbrado a correr no debes empezar a caminar a toda velocidad. Lo bueno es tomarse las cosas con mucha calma y relax -cada uno sabe cuáles son sus límites-, y, así, además de hacer ejercicio sin prácticamente darte cuenta, convencerás a tu pareja y amigos de que vayan a correr contigo cuando la temperatura acompañe un poco más. Hay que lograr captar a más atletas populares y como es evidente nadie va a empezar a correr con 30 grados. Así que tranquilidad, como tú bien sabrás cuando uno entra en este mundillo, ya no puede salir.
Como sucede con todo, puedes ir dando cada vez más caña a tus grandes caminatas. Así, incrementa la duración y el ritmo de tus paseos, a medida que vayan pasando los días. Ya se sabe, hacer 7 kilómetros de montaña sino estás acostumbrado no tiene ningún sentido porque si lo haces, no volverás jamás. Vete poco a poco, y de esta manera llegarás fuerte de forma a septiembre y octubre, con lo que además de realizar grandes tiradas con normalidad, lograrás estar en forma para volver a trotar o empezar si no lo has hecho nunca.
Eso sí, es muy importante que si vas a dedicar algo de tiempo a caminar por la playa o la montaña, te compres el material adecuado para esa función. Si no lo haces podrás caer en lesiones innecesarias... Ahora, ¡a disfrutar!
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