El secretario general del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm), José Santos, aseguró este jueves, durante su intervención en una jornada divulgativa sobre la prevención de patologías asociadas a las TIC, organizada por Unión Interprofesional en la sede de la institución colegial con motivo del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo (28 de abril), que “caminar utilizando nuestro teléfono móvil para whatsappear o enviar emails eleva hasta un 40% el riesgo de sufrir un accidente, ya sea por caída o atropello”.
Además, informó de que el uso prolongado de esta tecnología puede provocar la aparición de otros problemas de salud, como roturas tendinosas, cervicalgias, problemas oftalmológicos o, en el caso de las tabletas, disminución de la movilidad del cuello o insomnio, y en el de las videoconsolas, codo de tenista o lumbalgias.
Santos señaló que las tecnologías no son malas si se hace un uso responsable de ellas. “Lo que no podemos permitir es que el tiempo que se invierta con estos nuevos dispositivos suponga dejar de realizar otras actividades que requieran un mayor grado de actividad física”, defendió.
Así, recordó que España registra uno de los índices más altos de obesidad y sedentarismo infantil, y advirtió de que “no podemos consolidar esta tendencia utilizando las tablets y smarthphones de 'niñeras', es decir, para que el niño no moleste mientras los adultos hacemos alguna otra actividad”.
RIESGOS ASOCIADOS
Por su parte, el manager de Servicio de Prevención de Iberia, Diego González, que también intervino en la jornada, explicó que las nuevas tecnologías conllevan una carga física, ya que su uso puede implicar posturas estáticas, forzadas o repetitivas, pero también mental, porque ha incrementado la cantidad de información que recibimos, así como el tiempo de respuesta, y psicosocial. “Tener un móvil implica la obligación de estar 24 horas al día disponible para quien te quiera llamar, y puede suponer un exceso de supervisión”, añadió.
En este sentido, la psicóloga y técnico de prevención de riesgos laborales Yolanda de Frutos aseguró que las nuevas tecnologías aplicadas al ámbito laboral puede generar “tecnoestrés”. Y es que tal y como explicó esta experta, al estar constantemente conectados a través de estos dispositivos, “el trabajo invade nuestra vida personal y nuestra relación familiar, generando un mayor cansancio y aumentado la probabilidad de error”.
Según De Frutos, el usuario español permanece unas siete horas diarias de media delante de dispositivos, de manera que el nuevo sistema de trabajo puede generar otros fenómenos, como la “tecnoadicción” o dependencia psicológica de estar conectado, por ejemplo consultando constantemente el correo electrónico, u otros como la “nomofobia” o sensación de angustia o ansiedad cuando se olvida el móvil o éste se queda sin batería.
La también psicóloga y técnico en prevención de riesgos laborales Helena Thomas aseguró que el "tecnoestrés" es una enfermedad moderna cuya principal causa es la incapacidad de la persona para adaptarse y afrontar de forma saludable la incorporación de las TIC a su vida laboral.
“Como cualquier proceso psicosocial, las nuevas tecnologías afectan a las dimensiones cognitiva, afectiva–emocional y comportamental de la persona y para controlarlo hay que intervenir en estos tres aspectos”, añadió.
Por su parte, el abogado y director de recursos humanos Julio Nieves recordó la responsabilidad de los jefes o mandos intermedios de motivar a sus empleados y buscar su bienestar, “lo que implica evitar ejercer un acoso a través de las nuevas tecnologías”. “Hay que fidelizar a los profesionales y debemos de respetar sus tiempos para no provocar un efecto de 'burnout', en que el empleado acabe optando por el absentismo laboral o la procrastinación (postergación constante de las tareas)”, dijo.
Todos los intervinientes coincidieron en que para evitar problemas derivados de un uso abusivo de las nuevas tecnologías las compañías deben aplicar medidas técnicas, organizativas, de formación y de vigilancia de la salud, que ayuden al profesional a priorizar y gestionar bien los tiempos. Además, señalaron como fundamental para la disminución de riesgos la implicación de los trabajadores a la hora de elegir la tecnología con la que van a trabajar.
La jornada contó también con la participación de la directora general de Trabajo y Gerente del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Comunidad de Madrid, María del Mar Alcarcón; la coordinadora de la Comisión de Prevención de Riesgos Laborales de la Unión Interprofesional de la Asociación de Químicos de Madrid, Sara Fernández, y el consultor de Accesibilidad de ILUNION, Francisco Alcalde.
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Caminar mirando el móvil eleva un 40% el riesgo de sufrir un accidente
