Los beneficios de andar durante el embarazo
Caminar es el mejor ejercicio que puedes realizar durante el embarazo. Resulta fácil, seguro y beneficioso para tu bienestar y el de tu bebé. Solo debes seguir unas recomendaciones para que los paseos sean saludables.
¿Es bueno andar durante el embarazo? Desde luego que sí: los expertos coinciden en que se trata del mejor tipo de ejercicio físico que puedes realizar durante la gestación para sentirte bien y reducir las molestias de esta etapa, además del más universal al esta al alcance de cualquiera. Únicamente está contraindicado en embarazos de riesgo, si así te lo indica tu médico.
Los beneficios de caminar estando embarazada son muchos: tonifica los músculos, mejora la circulación y aumenta la oxigenación de la sangre, lo cual alivia trastornos habituales en las embarazadas como la hinchazón de los pies, la ciática y las hemorroides. Además, al fortalecer la musculatura pélvica y de las piernas, cuando llegue el momento de dar a luz los trabajos del parto serán más sencillos, así como la recuperación posterior.
En este sentido, si te encuentras bien puedes seguir andando hasta el día del parto, aunque siempre con prudencia. Por otro lado, disfrutar del ejercicio al aire libre genera endorfinas que te harán sentir positiva y descansar mejor.
A continuación puedes ver algunos consejos para andar durante el embarazo:
-Es mejor salir a caminar un rato cada día, aunque sea poco, que pegarte una “paliza” andando mucho tiempo solo uno o dos días por semana.
-Empieza por dar paseos cortos, de máximo media hora. A medida que te acostumbres, puedes ampliar la duración del paseo hasta una hora.
-Camina a un ritmo rápido pero sin excederte: si sientes que te falta el aire, mareos o pinchazos en la tripa, detente inmediatamente.
-Elige rutas que no sean demasiado complicadas, evitando andar por terrenos abruptos o resbaladizos para prevenir el riesgo de caídas.
-Lleva una botella de agua para hidratarte mientras haces ejercicio, así como alguna fruta o snack saludable por si te entra hambre.
-Usa un calzado cómodo, con suela plana o tacón bajo, así como ropa holgada que aísle del frío pero permita la transpiración.
-En verano, sal a andar a primera o última hora del día para evitar el calor; en invierno, es mejor salir a mediodía, cuando hace menos frío.
-No olvides protegerte del sol, porque tu piel es más sensible durante el embarazo a la aparición de manchas y otros trastornos cutáneos.
-Si puedes, queda con alguien para salir a pasear. Hace que sea más agradable y además el compromiso favorece la constancia.
Via blog.bebitus.com