Caminar es uno de los ejercicios más recomendados por todos los médicos. Esto se debe a que no reciente las articulaciones del cuerpo, y mantiene al mismo en movimiento y en buena forma.
Para caminar en los meses de verano, en los que el sol se siente fuertemente, se deben tomar ciertos recaudos para evitar sufrir daños al caminar expuestos a él.
En primer lugar, emprender la caminata cuando el sol todavía no esté asomado completamente, o si ya lo está, que no sea el punto más agobiante. Esto significa hacerlo por la mañana temprano o más tarde por las noches. La regla de oro aquí es permanecer fuera del sol desde las diez de la mañana hasta las cinco de la tarde. Este es el momento en que la luz del sol es más fuerte y los rayos ultravioleta pueden hacer más daño. Para mayor protección, trazar la ruta de la caminata y escoger zonas donde haya árboles o sombra bastante tupida.
En segundo lugar, mantente hidratado mientras caminas. Tómate un vaso grande de agua al menos una hora antes de empezar el paseo, y lleva una botellita de agua a la caminara para luego tomar el agua cada 20 o 30 minutos. Es conveniente evitar las bebidas gaseosas o azucaradas, porque estas últimas pueden hacerte sentir náuseas. Si piensas que estarás caminando por más de una hora y que se irás a sudar bastante, el agua puedes sustituirla por alguna bebida deportiva.
En tercer lugar, protege los ojos, la cabeza y la piel. Utiliza un sombrero o una gorra con una visera, así como también gafas de sol. Forma un escudo en la piel ante los rayos solares con el bloqueo solar para evitar las quemaduras solares. Procura además, llevar colores claros en tu ropa, ya que los oscuros absorben el calor mientras que los colores luminosos lo reflejan.avoreciendo los procesos digestivos y una correcta evacuación intestinal.
http://paraestarenforma.com/2010/12/19/caminar-en-verano-sin-ser-danados-por-el-calor/
Caminar en verano sin ser dañados por el calor
